TENER UN SEGUNDO PERRO


Antes de “adoptar” un nuevo perro, hay que meditar muchísimo la decisión. Si el motor de la adopción es hacer compañía al perro que ya tienes para evitar que se sienta sólo durante tus ausencias debes tener en cuenta que aunque este acompañado y comparta juegos con un segundo perro ésto, no remplazará las atenciones que tu peludo necesite de ti. Si aun así persistes en tu decisión debes prepararte para duplicar esfuerzos, atenciones y gastos veterinarios… Si multiplicas por dos todos los gastos y las cuentas te salen, ¡adelante! De lo contrario, olvídate. Un perro, es una vida y una responsabilidad.

TEN EN CUENTA AL PERRO QUE YA TIENES

Si tienes un perro mayor de 6 años (ya empieza a ser viejecito) es posible que tenga poca paciencia y/o que este enfermo y que la entrada de un nuevo perro le provoque ansiedad y más si es un cachorro. Ten en cuenta que un alocado de 4 patas, saltando por encima y jugando todo el día puede ser irritante para tu perro. 



VIGILA BIEN QUE PERRO INTRODUCIR EN CASA

Los responsables de las protectoras y otros centros de adopción conocen cada uno de los animales que tienen a su cargo. Estas personas pueden servirte de gran ayuda a la hora de elegir el más adecuado. Pregunta todo lo que necesites saber para poder tomar tu decisión.

No “adoptes” sin ton ni son. Debes encontrar un perro que pueda ser compatible con el que ya tienes por tamaño, sexo, carácter, vitalidad… Si no, pueden haber graves disputas. Cuando éstas suceden, un error muy común en estas situaciones por parte de los propietarios es la de intentar poner orden entre los perros. ¡¡Nunca!!.  Debes permitir que lo solucionen entre ellos a no ser que la sangre llegue al río. Ten en cuenta que estas peleas se llevan a cabo normalmente en presencia de la familia y suelen acabarse cuando cada uno de los perros asume su lugar en la relación (son dos desconocidos que marcan sus límites con bravuconadas) Habrán gruñidos, marcajes… pero, si interfieres, esperarán a estar solos para resolver los problemas y las consecuencias pueden ser peores…

NOTA: Si la situación no se calma, consulta a un especialista en comportamiento canino

PAUTAS PARA FAVORECER LA ENTRADA DEL NUEVO PERRO

>  Antes de la adopción, debes presentar ambos perros para que se conozcan y comprobar que hay química entre ellos. El primer contacto debe ser fuera del domicilio, en un parque o en la calle. Debes dejar que se exploren, jueguen o compartan algún juguete mientras los vigilas pero sin intervenir (así, el perro formará parte de esa decisión).

>  El primer día en casa, debes permitir al recién llegado que inspeccione su nuevo hogar con tranquilidad.

>  Jamás muestres más cariño a un perro que a otro. Deben ser tratados por igual y recibir la misma atención. Premiar (chuches, caricias) y acariciar a ambos perros de un modo positivo es especialmente importante para la convivencia.

>  Aliméntalos por separado

¿MACHO O HEMBRA?

Si tienes un macho y te decides por otro puedes tener problemas derivados por el instinto de  “dominancia”. Con dos hembras puede pasar lo mismo ya que son más posesivas con sus cosas, sus lugares e incluso con su dueño. Lo ideal es tener 2 perros de diferente sexo. La mejor solución en este caso es proceder a la esterilización del macho o de ambos.

NOTA: Siempre has de tener en cuenta que si compras un cachorro de determinada raza, tendrá unas características determinadas pero el carácter se forjará en base a sus experiencias y a la influencia de tu actual perro. Pero, si decides acudir a una protectora, un refugio etc estos cánones varían, cada uno de esos perros tienen una historia detrás que les han aportado un aprendizaje. Encuentra el más adecuado para ti, para el peludo que tienes en casa y para tu forma de vida.

CADA PERRO ES UN ENTE INDIVIDUAL



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