PERROS ESCAPISTAS
Muchos de
los propietarios de perros se quejan de las fugas de sus perros, y lo que es
peor: que no hagan caso cuando se les llama. Las fugas de los perros son peligrosas, puede haber accidentes y atropellos, así que hay que procurar por todos los medios que el perro no escape. Las causas de que un perro escape de casa pueden ser diversas: aburrimiento, necesidad de más actividad física, miedo a determinados ruidos o ansiedad por separación, instinto sexual, de caza....
Puede ser que el perro tenga fobia o miedo a determinados ruidos y
estos le lleven a un estado de nerviosismo que le haga huir de manera
descontrolada. Generalmente este miedo se debe a la falta de estímulos
auditivos, debemos procurar acostumbrarle a esos ruidos asociándolos con
situaciones agradables: juegos, "chuches"
Otra causa son las hembras en celo. Hay que tener en cuenta que un
macho puede obtener el olor de una hembra en celo que se encuentre a
varios kilómetros y el perro sobrepasará cualquier obstáculo para satisfacer su
instinto sexual. La mejor solución es la castración, aliviando así sus deseos sexuales.
Las huidas también pueden deberse a una
educación incorrecta. Hay una situación bastante común en los propietarios:
El perro esta suelto y el dueño lo llama y éste no solo no acude a la
llamada sino que cada vez que el propietario se acerca, el perro se aleja más. Para efectuar el cambio debemos tener mucha
paciencia y reforzar la relación de nuestro perro con refuerzos positivos. Si
chillamos, le seguimos y una vez “atrapado” lo atamos con la correa y nos lo
llevamos bruscamente, el próximo día , nuestro perro , hará exactamente lo
mismo. Debemos ser pacientes esperar que se acerqué, premiar ese acercamiento
con una chuche , cogerlo con la correa, premiarlo y volver a soltarlo y con
muchísima paciencia a volver a repetir el ejercicio recibiendo a nuestro perro,
cuando acuda a la llamada con una
caricia y no con reproches. En
caso de no poder corregir el problema en casa, se puede acudir a un adiestrador
canino.
Otra de las causas
suele ser el instinto de caza. Unos perros son más propensos a este instinto y
otros menos. A la mayoría de ellos le gusta perseguir objetos lanzados por
nosotros. Realmente, correr detrás de objetos en movimiento es para él la persecución de una presa. La pelota, palo o juguete que le lanzamos podría ser perfectamente un conejo, una liebre, un venado, un jabalí, etc. Sin darnos cuenta le estamos mostrando el objeto que debe cazar.
Otra causa son las ganas de explorar del perro. En esta causa, aunque no se puede generalizar, pero hay razas que son más propensas al "escapismo" por este motivo. Los perros nórdicos como (Husky Siberiano, Alaskan Malamute, Samoyedo...) de carácter independiente, adoran salir a explorar y buscar nuevos horizontes. Son expertos en localizar comidas de basurero, perseguir gatos.. Para cambiar esta conducta debemos educarlos bien desde cachorros o hablar con un profesional.
Las huidas también pueden deberse al aburrimiento; Falta de ejercicio, actividad, motivación. La solución aquí es muy sencilla: más paseos, más ejercicio y más tiempo del propietario con su perro.
> Las claves para evitar que un perro se habitúe a huir son:
1) Evitar reñir a tu perro usando su nombre. Cuando tengas que reñirlo usa la palabra NO, nunca su nombre. Éste debe ir siempre unido a cosas positivas para que cuando lo llames asocie que habrá un premio (caricia , chuche, elogios). Si tu perro asocia su nombre al castigo no te hará caso
2) Integración social. El perro debe sentirse parte de la familia. Los perros que normalmente están en el jardín o en una perrera no tienen un vínculo con los miembros de la familia. Por lo tanto sin apego, huir es una manera de quemar sus frustaciones
3) Cuando el perro se haya escapado o se aleje ante tu llamada, ten cuidado con tu gestualidad o tu pose corporal. Ellos notan nuestros enfados. Mejor es que te serenes, te agaches y tengas paciencia
4) Por muy enfadado que estés con tu perro nunca le castigues porque no evitarás que vuelva a hacerlo sino que cuando lo haga de nuevo, tardará más en volver a casa por miedo al castigo
Otra causa son las ganas de explorar del perro. En esta causa, aunque no se puede generalizar, pero hay razas que son más propensas al "escapismo" por este motivo. Los perros nórdicos como (Husky Siberiano, Alaskan Malamute, Samoyedo...) de carácter independiente, adoran salir a explorar y buscar nuevos horizontes. Son expertos en localizar comidas de basurero, perseguir gatos.. Para cambiar esta conducta debemos educarlos bien desde cachorros o hablar con un profesional.
Las huidas también pueden deberse al aburrimiento; Falta de ejercicio, actividad, motivación. La solución aquí es muy sencilla: más paseos, más ejercicio y más tiempo del propietario con su perro.
> Las claves para evitar que un perro se habitúe a huir son:
1) Evitar reñir a tu perro usando su nombre. Cuando tengas que reñirlo usa la palabra NO, nunca su nombre. Éste debe ir siempre unido a cosas positivas para que cuando lo llames asocie que habrá un premio (caricia , chuche, elogios). Si tu perro asocia su nombre al castigo no te hará caso
2) Integración social. El perro debe sentirse parte de la familia. Los perros que normalmente están en el jardín o en una perrera no tienen un vínculo con los miembros de la familia. Por lo tanto sin apego, huir es una manera de quemar sus frustaciones
3) Cuando el perro se haya escapado o se aleje ante tu llamada, ten cuidado con tu gestualidad o tu pose corporal. Ellos notan nuestros enfados. Mejor es que te serenes, te agaches y tengas paciencia
4) Por muy enfadado que estés con tu perro nunca le castigues porque no evitarás que vuelva a hacerlo sino que cuando lo haga de nuevo, tardará más en volver a casa por miedo al castigo
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